La palabra poesía...

martes, 24 de octubre de 2023

ANTIRRACISMO

Una lucha antirracista que no se las juega por otras pieles más allá de la propia identidad, 

que pasa de largo  ante el derramamiento continuado de sangre que no sea de la propia estirpe, 

que le pone límites geográficos al dolor y esclavización de los otros, 

que no se conmueve ante genocidios que no sean los de la propia historia, 

que es neutral y hace silencio ante el llanto de miles de niñas y niños  ajenos,

una lucha antirracista que le hace la corte a las delegaciones de baja monta que se retiraron de la cumbre histórica que en Sudáfrica plantó cara al racismo y sus derivas en todas las formas violentas de muertes;

una lucha antirracista que sustrae con pinzas y desarticula a conveniencia el Plan de acción de Durban, 

esa lucha antirracista que juega a la rayuela con los grandes criminales del capital y sus perros de guerras;

y esa lucha antirracista endogámica que sólo pinta negro, que sólo pinta originario si de los suyos se trata; 

con un corazón disecado ante el dolor ajeno, indiferente corazón, mezquino corazón, cómplice corazón, bastardo corazón!

y esa lucha antirracista políticamente correcta, ingenua, neutral, no comprometida, 

que corre calzada tras la mejor foto, aquella capaz de viralizarse virulenta, perfecta, antiséptica, sin anti-cuerpos, casi perfecta,

y esa lucha antirracista que  se erige en vocería de todas  las luchas antirracistas, que negocia, vuela en primera clase y hasta en segunda, pero vuela; negocia, se regodea, hace el cruce trasatlántico en clase business. Nuevas castas herederas de la colonia, siervos de nuevo tipo del mismo amo; 

esa lucha antirracista que no ha derramado la primera lágrima por las guerras que le son ajenas, 

Esa lucha antirracista selectiva, consustanciada con el fascismo, con los genocidas, no me representa...

Lilia Ferrer-Morillo 

sábado, 7 de octubre de 2023

HAY MUJERES


Que nos pare la tierra 
que nacemos entre las llamaradas
del rojo vivo encendido 
del magma fundido
de los minerales prehistóricos
que se cuelan entre las líneas imperceptibles
de fallas que mantienen en vilo
capas tectónicas de olvidos
y nos nacemos montañas
crecidas del fallamiento 
de todo lo creado
todo lo nacido.

Hay mujeres 
que estamos hechas 
de aguas profundas, subterráneas, furtivas
que jamás conoceremos el sol
la luna las estrellas
y sus superficies.

En las profundidades insospechadas
somos nuestro propio sol
río subterráneo viviendo
al ras del núcleo externo líquido 
de la tierra y sus orillas.

Hay mujeres 
que estamos hechas de raíces  
que nos abrazamos debajo de la tierra 
invisibles
más resistentes 
que todo nudo gordiano 
que imaginemos
más allá de la capa vegetal externa 
que sostiene la vida. 

Hay mujeres que sí
estamos hechas de memoria
todas, de historias
que nos narran 
que se niegan 
al silencio
al olvido
a la ausencia
de la palabra
de los sonidos
al borramiento
de la huella
la nuestra
de la faz 
de la tierra 
de sus profundidades
donde todas las raíces
todas las aguas
todos los fuegos
se encuentran. 

Lilia Ferrer Morillo

EL BESO

Los labios bañados  por la única  gota de agua salobre   mineralizada  en los poros  jadeando  en fuga   tras rocas  prehistóric...