La palabra poesía...

jueves, 24 de noviembre de 2022

AGAPANTOS


A Hebe, Infinita!

Yo vi largos lirios africanos 
hacer la ronda de los jueves 
a las tres de la tarde 
en una Plaza que llovía pupilas enrojecidas
una Plaza que ensanchó sus alamedas 
hasta más allá del Río de la Plata 
para darte paso Madre de Mayo 
Madre de todos los tiempos 
Madre Matriada que nos naces 
toda vez que los agapantos paren 
sus minúsculas florecillas azules 
como el azul bandera, como el azul cielo 
como el azul de todos los mares azules 
que en sus costas divisan al niño 
que camina sobre las aguas 
de la Memoria 
que no naufraga más,

Yo vi agapantos crecerse en tus cenizas 
y nacer floridos, nacer erguidos 
y nacer-nos sumergidos 
en el tallo infinito 
que del otro lado del Riachuelo 
muralea una ronda a la luna 
una ronda de niñas 
una ronda que es la suma 
de todas las rondas de las tres de la tarde 
que nunca termina,

Yo vi agapantos nacer 
de tus cenizas 
ser Fénix contigo 
Fénix renacido 
antes de ser cenizas, 

Yo vi agapantos azules 
cubrir sus cientos de florecillas 
con pañuelos blancos 
atarlos a su largo cuello 
y ser caminos,

Yo vi agapantos hacerse caminos
en esta ronda triste
que jura ante tu propio juramento
rondar, rondar, rondar
ser camino... 

Lilia Ferrer Morillo 
En Buenos Aires, en este jueves de ronda a la Plaza de Mayo de las tres de la tarde que no termina

lunes, 21 de noviembre de 2022

SOY

El reflejo más húmedo
de mí-misma
deslizándome en mi propia lágrima,


Soy
transparencia acuosa
fijada en el ápice
del rocío que no cesa,

Soy
gota de recuerdo
atrapada en un único granizo
y todas sus lluvias congeladas
por los siglos de los siglos,
 


Soy
el agua muerta
de un mar que no respira
que yace erguidamente líquido
sin evaporarse en el jamás,
 
Soy
sal fosilizada
en tu hipodermis desnuda
resucitada en el acervo líquido
de influjos acuosos
a punto de estallar,
 
Soy
agua de mar
riachuelos y saltos
alimentados de lloviznas
que terminan en tempestad,
 
Soy
el estado más líquido
de los días
sin fin y sin forma,
como Ítaca, toda caminos
anhelando libertad.

Lilia Ferrer-Morillo
          

EL BESO

Los labios bañados  por la única  gota de agua salobre   mineralizada  en los poros  jadeando  en fuga   tras rocas  prehistóric...